Los vecinos de San Sebastián de los Reyes depositan 643.000 prendas de ropa en los contenedores de la Fundación Humana en el primer semestre del año. Son 142.832 kg de textil usado para darles una segunda vida a través de la reutilización o el reciclado.
Su gestión permitirá alargar su vida útil e implicará un doble beneficio. El primero es ambiental, porque reduce la generación de residuos y evita que acaben en un vertedero. Además, la recuperación del residuo textil en lo que llevamos de año representa un ahorro de 452 toneladas de CO2 no emitidas a la atmósfera.
El segundo beneficio es social y consiste en la creación de empleo verde. Además, los recursos obtenidos se destinan a proyectos sociales: tras más de tres décadas de actividad, tres millones de personas se han visto involucradas en los programas de desarrollo en los países del Sur de la mano de contrapartes o socios locales; son proyectos centrados en la formación de profesores de primaria, el impulso de la agricultura sostenible o la lucha contra el VIH/SIDA, entre otras acciones.
Cada ciudadano desecha cada año entre 20 y 30 kg de textil. Según los informes más recientes, en España se recogen 110.000 toneladas de residuos textiles anualmente, apenas representa algo más del 10% de lo que generamos en nuestros hogares. Sólo se recupera selectivamente una décima parte para promover su reutilización o reciclado; el resto se tira en otras fracciones y acaba en un vertedero.
El destino de la ropa usada
El principal destino de las prendas depositadas en los contenedores de Humana es la planta de preparación para la reutilización de la Fundación en Leganés, y una pequeña parte se vende a empresas de reutilización y reciclado. El destino de las prendas tratadas es:
· El 54% se destina a reutilización: el 14% a través de las tiendas secondhand y el 40% se exporta, principalmente a África para ser comercializado, hacer accesible la vestimenta en países menos desarrollados y generar recursos para la cooperación al desarrollo.
· El 37,5% se encuentra en un estado que no permite su reutilización por lo que se vende a empresas de reciclaje textil para que elaboren otros productos (mantas, aislantes o trapos para la industria de automoción)
· El 1,5% son residuos impropios (plástico, cartón, otros) que se pone en manos de gestores autorizados.
· El 7% no se puede reutilizar ni reciclar ni valorizar energéticamente y se envía a un centro de tratamiento de residuos para su disposición final.