El Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes, concretamente la Concejalía de Parques y Jardines, empezó el pasado mes de abril la campaña de desbroce anual de parcelas y parques periurbanos municipales.
Este año los trabajos abarcarán las más de 148 hectáreas del municipio. Estas labores se desarrollarán hasta el mes de octubre aplicando nuevas técnicas de intervención que atenderán a factores medio ambientales, de equilibrio en la biodiversidad y de seguridad en materia de prevención de incendios. Desde la Delegación se informa que, según se vaya agostando la vegetación, se realizará la siega completa como prevención por el riesgo de incendios en verano.
En esta temporada también se pone en marcha la implantación del proyecto piloto denominado “Alcorques vivos”, cuyo objetivo es la gestión natural de plagas en el entorno urbano para mantener y mejorar la salud del arbolado.
Biodiversidad y seguridad contra el fuego
Con la llegada de la primavera el paisaje de la ciudad se transforma a lo largo y ancho de sus zonas verdes y praderas naturales con la consiguiente explosión de vida y biodiversidad. Este acontecimiento mantiene un equilibrio entre todas las especies que conviven en estos espacios.
Al mismo tiempo, en un municipio mixto como el de San Sebastián de los Reyes, en el que se combinan zonas de distinta tipología, se forman comunidades estacionales compuestas por decenas de especies vegetales anuales y perennes. En este contexto una gestión adecuada de los trabajos debe acomodar sus trabajos de desbroce anual preservando y asegurando obtener una sucesión de floraciones.
Desde la Concejalía se apuesta por cambiar la gestión tradicional que les daba escaso valor basada en un tratamiento en su desbroce repetido, similar a la siega de césped, por otro sistema en la que se valoran estas parcelas como una alternativa paisajística de alto valor estético y ecológico incrementando la biodiversidad y la belleza de la ciudad.
Equilibrio entre flora y fauna
En este sentido, la concejal de Parques y Jardines, Alejandra Muñagorri (Cs), ha explicado que “estas praderas, además de jugar un papel estético, suponen un esencial equilibrio entre la flora y la fauna aumentando la biodiversidad”, ampliando que “los polinizadores crecen y se multiplican gracias a los recursos alimenticios de las flores de estas praderas y estos ayudan a su vez a mantener la proliferación de estas especies”.
El objetivo por tanto es conjugar el desarrollo natural de estas praderas con el uso público de las mismas y la prevención de posibles incendios aplicando desbroces en superficies que varían en extensión dentro y fuera del casco urbano y finalizando con la siega completa.
Alcorques vivos
Este año se activa el proyecto piloto “Alcorques vivos” en el arbolado urbano que tiene como objetivo la gestión natural de plagas reduciendo la intervención de operarios y plaguicidas. En palabras de Muñagorri el “mantener la vegetación de algunos alcorques del arbolado urbano aporta muchos beneficios y mejora la salud del arbolado, el drenaje y la oxigenación del suelo, aporta nutrientes, evita la evaporación del agua y, además, permite que aniden depredadores naturales que son fundamentales para la gestión natural de plagas que pueden ser dañinas para el arbolado urbano”.