Muchos seréis los que conozcáis y habréis leído el libro “Historia de San Sebastián de los Reyes – Tomo I” del que es autor el anterior Cronista de Sanse, Isidoro Rodríguez Tato “Doro”, pero en esta ocasión me voy a referir a otro de sus libros como es “Historia Taurina de las Fiestas del Cristo”, editado el año 1999, en él no menciona ningún hecho acaecido de los años 1909 y 1910, aún en los albores del siglo XX.
En mis años de Archivero Municipal sí que encontré los expedientes de los festejos acaecidos durante los años mencionados. No podemos destacar en ellos hechos relevantes que ocurriesen en este periodo, pero si que considero interesante continuar una cronología seguida que pasar por alto estas fechas.
Siempre hay datos que destacar, aunque resulten nimios, pero que a veces nos desvelan algunos datos y nombres que nos pueden resultar familiares, sobre todo a los nativos o arraigados en esta localidad, y por supuesto también para todos aquellos que han apostado por vivir en nuestro pueblo o lugar, sabéis que me resisto a decir ciudad, que de hecho ya lo somos con cerca de 100.000 habitantes, pero creo que cuando hablamos de nuestra historia que es de todos los que aquí moramos, resulta como más familiar recurrir aún al término pueblo, y por favor no uséis el gentilicio “sanseros” como vengo oyendo de labios de personas un tanto relevantes en nuestra localidad, lo de sanseros lo dejaremos para los seguidores de nuestro querido equipo de fútbol. Considero que se debe utilizar el de “sansebastenienses” o el que oralmente se ha ido transmitiendo generación tras generación el de “apodacas”.
Muchos me han preguntado que de dónde proviene lo de apodacas, y os diré que el origen del nombre de apodacas fue debido a que un tiempo pasado, hablemos de siglos, algunos vecinos de la cercana villa de Alcobendas se dirigían a los de San Sebastián de un modo un tanto peyorativo con esta denominación, pues parece ser que la totalidad de los vecinos de Sanse tenían apodos y eran conocidos por ellos, cosa que no ocurría en su villa. Así me lo contó Doro que lo había oído decir a los mayores de este Lugar, porque he de deciros en “secretillo” que hemos pasado de Lugar a Ciudad, algo insólito que no éramos pueblo sino lugar.
En mis dos libros “Episodios de la Historia de Sanse” dedico varias páginas a los apodos que aún mantienen muchas familias de nuestra localidad, y que afortunadamente para mi ninguno me ha recriminado el que les citase.
Los Libros de Actas Municipales
Los Libros de Actas Municipales o Capitulares es con mucho la serie documental más importante que puede atesorar una localidad, pues en ellos quedan plasmados y recogidos todos los acuerdos y hechos de la vida local y que en definitiva es su Historia y que estos libros tienen que ser conservados y debidamente custodiados, pues tienen que ser transmitidos de generación en generación.
En los libros de actas de estos años a que me estoy refiriendo, 1909 y 1910, no queda ninguna constancia por parte del secretario municipal, Plácido de la Torre, de que se tomasen acuerdos sobre los festejos a celebrar con motivo de las fiestas del Cristo de los Remedios, algo que me resulta un tanto insólito.
Afortunadamente, como exponía al principio de mi escrito, si se conservan los expedientes de festejos, y de éstos voy a exprimir las noticias más jugosas que tuvieron lugar en esas fechas.
Aunque quizás alguien me diga que este dato es un tanto obvio, pero sí que lo voy a exponer para conocimiento de algunos o quizás muchos nuevos vecinos de Sanse. Dejo en el aire los días de festejos que actualmente se programan, me limitaré a citar los que tradicionalmente se han celebrado durante siglos y que así se denominaban:
Día 27 de Agosto: Día de la Pólvora
Día 28 de Agosto: Día del Cristo
Día 29 de Agosto: Día de los Toros
Día 30 de Agosto: Día de las Higueras
Expedientes de Festejos de los años 1909 y 1910
AÑO 1909
Lo primero que nos encontramos al abrir el expediente es la cuenta detallada de Ingresos y gastos, están “cerradas” el 16 de septiembre.
Ingresos 4.316 pesetas
Gastos 2.638 “
En principio podemos pensar que hubo un importante superávit, pero a continuación nos enumeran una serie de pagos que hay que efectuar y que estos ascienden a 1.121 pesetas. Por lo tanto, el beneficio se reduce a 557 pesetas. Entre los pagos pendientes está un adeudo a Manuel Frutos, ganadero de toros bravos de la localidad, por dos toros que se van a lidiar el día 28 de septiembre. Este es un dato “nuevo” que se nos presenta, pues no teníamos constancia de que se diesen toros a finales de septiembre.
Toros el día 29 de Agosto
Sabemos que el día 29 de agosto se celebró una corrida de cuatro toros de la ganadería de Pablo Torres y Félix Sanz, de Colmenar Viejo, antes de doña Áurea Gómez, por un importe 3.312 pesetas. Al final se rebajaron 175 pesetas por el cambio de un toro. Como curiosidad aparece en el contrato los nombres de los toros que se van a correr:
Nº 36 llamado “guerrero”
Nº 15 llamado “ruletero”
Nº 9 llamado “florido”
Nº 4 llamado “timador”, ojo perdiz.
Este último toro fue cambiado por exceso de peso.
El coste de los toros no aparece en el presupuesto general de las fiestas, desconocemos el motivo, bien por omisión, difícil que fuese así por lo elevado del mismo, o bien porque fuese pagado de otra partida presupuestaria, puesto que si aparece en los ingresos lo recaudado por los billetes vendidos el día 29 de agosto, 2.079 pesetas.
El lidiador de estos toros fue Gregorio Taravillo “Platerito”, según consta en el contrato. En este figura que será acompañado por dos picadores y cuatro banderilleros, y que uno de éstos actuará de sobresaliente y que matará el último toro.
Por otra parte, hay un contrato con don Vicente Ortega, vecino de Madrid que llevará seis caballos y el atalaje para las mulillas para la corrida del día 29 de agosto. El importe es de 625 pesetas que si consta en el presupuesto.
Observamos como curiosidad que confunden en los contratos el apellido del alcalde en vez de Hermenegildo Izquierdo aparece apellidado Gutiérrez, que en varios casos es tachado y subsanado.
Los fuegos artificiales o la “pólvora” como se la conoce por los vecinos fueron disparados por el pirotécnico Pedro Herreros, de Orusco (Madrid). En el programa figuran hasta 52 clases de disparos. En las condiciones que estipulan está que el ayuntamiento tiene que destinar un local para trabajar, maderas para sujetar las piezas y dos peones para ayudar a poner y quitar los artefactos.
Los tendidos fueron montados del día 6 al 26 de agosto, y desmontados del 9 al 16 de septiembre. Los encargados de hacer y deshacer los tendidos fueron:
– Nicanor (de la Sen)
– José Rojo
– Marcial Sanz
– “Barraca”
– “Civilón”
El depositario de las fiestas o de la “función” como se la denominaba entre los vecinos fue Eustaquio Navacerrada, que era el encargado de recibir los ingresos y efectuar los pagos.
Entre los recibos que se conservan están los pagos efectuados a:
Jaime Pérez, por importe de los músicos de orquesta y capilla, 360 pesetas.
Antonio Frutos Mardones, por traer y llevar a los músicos, 25 pesetas.
Venancio Sanz, por hospedar a los músicos de capilla, 10 pesetas.
Sabina Esteban por hospedaje y manutención de los músicos, 44 pesetas.
Venancio de la Sen, por refresco de los músicos, 1,20 pesetas.
Francisco García, por el servicio de cinco acomodadores, 50 pesetas.
Caya del Campo, por el jabón y lavar la ropa de la enfermería, una peseta.
Prudencio de la Sen, por una cuartilla de vino para los músicos, 1.20 pesetas.
Al predicador por el sermón del día del Cristo, 50 pesetas.
Vicente Rico, de Madrid, por 12 faroles y bujías, 9,50 pesetas.
Correspondencia
De esta cabe destacar el oficio enviado por el Gobernador de la Provincia, el Marqués de Vadillo, tanto para la autorización de la corrida de toros del día 29 de agosto como para la del día 8 de septiembre.
Se reproduce la autorización enviada al Señor Alcalde, fechada el día 6 de septiembre de 1909.
“Visto el oficio del día 4 del actual, he acordado autorizarle para celebrar en esa villa (sic) el día 8 de los corrientes una corrida de novillos, bajo la dirección de los diestros Manuel Gómez (Pimo) y Severiano Saltos (Saltitos), debiendo advertirle la prohibición absoluta de que la corrida degenere en capea, previniéndole asimismo se atenga en todo a las disposiciones contenidas en la Real Orden de 5 de febrero de 1908 y demás aplicables al caso, bajo su más estrecha responsabilidad, que le será exigida caso de contravención de alguna de ellas.
Dios guarde a Vd. muchos años.
Madrid 6 de septiembre de 1909.
Firmado: Vadillo.”
A través de esta autorización sabemos el nombre de los novilleros que actuaron el día 8 de septiembre, y por el desglose de las cuentas que los novillos eran de Manuel Frutos del Campo, ganadero de esta localidad.
AÑO 1910
El expediente de este año contiene una información bastante curiosa y quizás más representativa que la del año anterior, como veremos más adelante.
El superávit es menor que del año 1909, según consta en las cuentas que presenta Eustaquio Navacerrada, depositario de las fiestas del Cristo de los Remedios, este asciende a 64,90 pesetas.
Se conservan los contratos con los matadores del día 29 de agosto, que son Eusebio Fuentes, representado por José Zabala, por parte del ayuntamiento lo firma Leandro Díaz y el importe asciende a 450 pesetas y se obliga a llevar dos banderilleros, un puntillero y un picador, y el otro es Adolfo Guerra, que cobrará 400 pesetas, acompañándose también de dos banderilleros, un picador y un puntillero.
El contratista que aporta los caballos es el mismo del año anterior, Vicente Ortega, el importe es de 625 pesetas.
Los toros que se lidian son también de la localidad de Colmenar Viejo, de la ganadería de Mariano Torres Sanz, y que ascienden a 3.000 pesetas.
Los fuegos artificiales son disparados este año por la pirotecnia de la Viuda de Pascual Martí, de Tetuán de las Victorias.
En este año es de destacar la numerosa correspondencia que aparece, además de la oficial del Gobierno de la Provincia, hay ofrecimientos de bandas de música, entre ellas la Filarmónica de Madrid y la de Jaime Pérez que ya actuó el año anterior.
Las más representativas son los ofrecimientos de varios toreros para actuar en esta plaza durante las fiestas. Mencionaremos la de Luis San Juan “Gavira Chico” que se ofrece en condiciones ventajosas; la de Enrique Fernández “Carbonero”; la de Hipólito Zumel “Infante”; Eduardo García “Rondeño” y otra de Gregorio Garrido, en su escrito argumenta que ha toreado en Santo Domingo de la Calzada, Zaragoza, Montpellier y Nimes (Francia), Ávila y Tetuán y Vista Alegre de Madrid, y últimamente en Getafe y Andújar y que alternado con toreros como “Celita”, “Carbonero”, “Copao”, “Llaverito”, “Montes II” y “Machaquito”.
Por otra parte, hay un escrito de Mariano Montes, nativo de esta localidad y avecindado en Madrid, en el que recomienda a los jóvenes Adolfo Guerra y Eusebio Fuentes, debió tenerse muy en cuenta esta propuesta, dado que estos fueron los novilleros contratados.
Los toros de septiembre
Es tradicional celebrar, al menos, otra corrida de novillos en el mes de septiembre, casi siempre coincidiendo con el día ocho, festividad de la Natividad de Nuestra Señora, el denominado día de la “Virgen de Septiembre”, aunque se ha constatado que en año anterior se corrieron novillos a finales de este mes. Incluso hubo años que se celebraron novilladas el día16 de agosto, festividad de San Roque.
Entre los documentos que se conservan en el expediente de 1910, hay dos peticiones de vecinos del pueblo, y que se reproducen los párrafos más interesantes.
El primero está fechado el uno de septiembre y lo encabeza Manuel Montes Colmenar, comienza recordando que siendo costumbre inveterada el celebrar una fiesta taurina el día ocho de este mes, propone lo siguiente:
“Me comprometo en unión de don Miguel del Campo, vecino de esta localidad, a dar una corrida mixta compuesta de dos novillos que serán estoqueados por persona técnica, y cuatro o seis novillos de mi propiedad para la capea que se celebrará después de la muerte de los primeros.
Suplica que esa digna Corporación haga la cesión gratuita de la plaza pública destinada a este espectáculo, siendo de mi cuenta cargo y riesgo los ingresos y los gastos que se originen para la celebración de esta fiesta, advirtiendo que los beneficios que se obtengan o puedan obtenerse serán destinados a socorrer a los pobres de esta localidad. Que de los gastos habrá que deducir los de; diestros, banderillas, carteles, billetaje y acomodadores.
Firmado: Manuel Montes.”
La siguiente solicitud está firmada por Manuel Frutos “el tío calavera”, el día 2 de septiembre, en la que se compromete para que el día ocho actual dar una capea de cinco reses y la muerte de dos toros, dejando la cuarta parte de lo que produzca dicha fiesta a beneficio de los pobres de la localidad y gastos de carteles y billetaje necesarios.
La cuadrilla para lidiar los dos toretes de muerte será de cuenta del ganadero. Que serán de mi cuenta exclusiva los gastos de toreros, banderillas, billetaje, carteles y acomodadores.
No consta a quien de los dos peticionarios le fue adjudicada la tradicional novillada del Día de la Virgen.
No obstante, os recomiendo que leáis el libro de Doro, “Historia Taurina de las Fiestas del Cristo”, pues es una forma más de conocer la idiosincrasia de los “apodacas” y las costumbres inmemoriales de nuestra Ciudad
Santiago Izquierdo G. Bárcena
Cronista Oficial de San Sebastián de los Reyes y Archivero Municipal emérito