La Primera Federación está viviendo un momento convulso en lo extradeportivo. Y es que los clubes que la conforman tienen que votar que modelo de competición quieren para el futuro. Por un lado, está un modelo conjunto de gestión de derechos televisivos, control económico y ayudas financieras y por otro un modelo «libre» en el que los equipos podrían decidir individualmente su destino, pero no tendrían ayudas económicas de la RFEF.
Hay clubes que no están de acuerdo en ninguno de los dos planteamientos, ya que se considera que el recibo de ayudas está supeditado al modelo que quiere la RFEF. Por ello, 18 clubes, entre los que se encuentra la Unión Deportiva San Sebastián de los Reyes, han emitido un comunicado conjunto. En él se aclara que «el plazo otorgado para la contestación es demasiado breve al tratarse de una cuestión de vital importancia».
Además, niegan que «estén en contra del control económico de la competición. Lo han solicitado desde la creación de la categoría». También explican: «no nos parecen adecuadas las directrices generales del control económico que se proponen siendo necesario su desarrollo y concreción antes de su puesta en marcha el 1 de julio de 2023».
El convenio colectivo también es motivo de polémica, ya que «la RFEF no se puede convertir en agente activo y dinamizador del proceso, pues carece de toda representatividad«. Los acuerdos comerciales individuales también están en el foco. «Supone un misil a línea de flotación de los clubes», concluyen.