El pasado pleno municipal de San Sebastián de los Reyes contó con uno de los temas que más están preocupando recientemente a varios vecinos de la localidad. El aumento del ruido de los aviones en diversas zonas. Tal y como informó Diario de Sanse, la moción de Izquierda Independiente para acordar exigir la modificación de las rutas aéreas para evitar el sobrevuelo de aviones por el casco urbano fue votada favorablemente por todos los partidos.
El Alcalde, Narciso Romero, por primera vez desde que este asunto saliera a la luz pública, dio explicaciones sobre como está la situación y si hay posibilidad de que se modifiquen las condiciones de vuelo. El primer edil fue muy sincero al dejar la frase «son lentejas», ya que obedece a normas de obligado cumplimiento.
«Este problema no ha surgido recientemente. Existe en el archivo municipal un documento remitido en 2014 por la Dirección General de Aviación Civil de la Secretaría General de Transporte del Ministerio de Fomento. Gobernaba el PP en el Gobierno de España, con motivo de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de San Sebastián de los Reyes. El documento no es consultivo ni negociable, sino que es imperativo», comenzaba su exposición.
«El planeamiento debe incorporar con carácter normativo los planes de las servidumbres aeronáuticas acústicas del aeropuerto Adolfo Súarez Madrid – Barajas que se adjuntan. El planeamiento deberá recoger referencia expresa en la normativa del Plan General que no son compatibles los usos residenciales ni los dotacionales educativos o sanitarios en los terrenos afectados por las curvas isofónicas de 60 decibelios al día 60 por la tarde y 50 por la noche», comentaba.
Además, daba a entender que no había nada que hacer. «Son seis páginas de obligaciones. Ni discutibles ni negociables. Son lentejas. Como saben la estructura territorial de Sanse es de distintos asentamientos a los largo de la A1. Ahora es un continuo urbano. Desde el casco hasta Ciudalcampo. De este modo, cualquier intento de volar hacia el oeste afectará intensamente a áreas urbanas consolidadas», expresaba.
A su vez, daba una explicación técnica y echaba la responsabilidad al Gobierno de España. «Los planos entregados por el Ministerio de Fomento en 2014 delimitan las manchas acústicas de los tres niveles de ruido y trazan la envolvente de las tres curvas isofónicas. El que se dirige al oeste cruza el suelo urbano del municipio. Pasa por la urbanización de La Granjilla. Es asunto de interés y decisión estatal. El Ayuntamiento no pierde la oportunidad de reclamar a aviación civil la modificación de las condiciones establecidas ofreciendo alternativas de trazado de trayectoria en planta y elevación, pero las decisiones son de carácter estatal. Tienen más peso las razones medioambientales del Ministerio y las económicas de las compañías sobre el al parecer, el aumento del consumo de combustible que entrañan nuestras alternativas», aseveraba.
El propio Romero verbalizaba las dos alternativas ofrecidas. La primera es aumentar la altura de la navegación en el sobrevuelo sobre el suelo urbano, realizando una rápida navegación antes del giro hacia el oeste. La segunda es prolongar el itinerario hacia el norte antes de iniciar el giro hacia el oeste, pero como ello se encontrará con afecciones a Ciudalcampo y Santo Domingo, también podría forzarse la elevación del vuelo desde el inicio. «Estas alternativas de mayor coste económico y medioambiental ya están siendo obligadas en algunos aeropuertos de Europa en áreas densamente pobladas como Londres. No pueden considerarse atrevidas. La rápida elevación es la solución hasta que los fabricantes soluciones el ruido de los motores», declaraba el Alcalde.
Por último, reiteraba la responsabilidad. «El Ayuntamiento ha entendido desde hace meses a la creciente inquietud del mayor ruido de aeronaves precisamente por el desplazamiento del ruido de siempre hacia zonas más densamente habitadas, como Dehesa Vieja. Se debe a decisiones por las que el municipio no tiene capacidad de intervención. Son decisiones adoptadas por aviación civil, AENA y ENAIRE. Lo que han hecho se ajusta a mejorar la legalidad. Nuestra propuesta solo ha servido para que nos den explicación del aumento de ruido en zonas como Dehesa Vieja. Los aviones tienen que cruzar, irremediablemente sobre el suelo urbano del municipio. El estado se resiste a modificar la norma. Sin embargo, el Ayuntamiento mantendrá la vigilancia sobre la afecciones acústicas», concluía.
La explicación no dejaba muy satisfecho al Partido Popular, ya que consideraba que no había respondido a las demandas que le había lanzado previamente. «Nosotros tenemos informaciones oficiales. En una reunión, en la que estaba presente el Alcalde, en noviembre se dijo que se cambiaba la ruta. Queremos conocer porque el Alcalde ha solicitado un cambio de ruta en Sanse», manifestaba.