El cuarto encierro de las Fiestas de San Sebastián de los Reyes, celebrado este 28 de agosto de 2024, se ha destacado por su rapidez y limpieza, consolidándose como uno de los más seguros hasta la fecha. Con una duración de 2 minutos y 54 segundos, este encierro ha sido uno de los más veloces de las fiestas, en parte gracias a que los protagonistas han sido novillos, cuya agilidad y velocidad han marcado el ritmo vertiginoso de la carrera.
La manada salió muy agrupada desde los corrales, cubierta en gran parte por los cabestros que lideraban el recorrido. Sin embargo, el desarrollo del encierro cambió drásticamente cuando dos novillos tomaron la delantera al final de la calle Real Vieja, adelantando al resto de la manada en la calle Postas. Este movimiento fue determinante, ya que los novillos imprimieron un ritmo endiablado que abrió huecos en los últimos tramos, permitiendo ver algunas de las mejores carreras de las fiestas.
A pesar de la velocidad y la intensidad del recorrido, el encierro transcurrió de manera limpia, con apenas dos asistencias por caídas, lo que refuerza la seguridad del evento a pesar del notable aumento en la participación, que en esta ocasión contó con 2.500 corredores. Este dato es especialmente significativo, considerando que la cifra de participantes ha duplicado la de jornadas anteriores.
El momento de mayor tensión se vivió en una curva en la cuesta arriba, donde uno de los novillos, en plena aceleración, se lanzó tras un joven corredor. En un acto reflejo, el joven logró escapar al saltar por encima de la talanquera en el último instante, aunque perdió una zapatilla en la maniobra. Afortunadamente, salió ileso de la peligrosa situación.
Pedro Martínez, responsable de Protección Civil, ha destacado la importancia de que solo se hayan registrado dos asistencias, a pesar del elevado número de corredores. «Ha sido un encierro limpio, y es destacable que con tanta participación haya habido tan pocas incidencias», comentó.
El cuarto encierro de las fiestas ha demostrado que la combinación de velocidad y seguridad es posible, dejando a los asistentes con la emoción de un recorrido trepidante y sin mayores contratiempos.
