El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado una solicitud de sucesión para el título nobiliario de Marquesa de la Villa de Pesadilla, una distinción que tiene sus orígenes en el siglo XVII. La solicitud ha sido presentada por Elena de Carranza y Churruca, quien aspira a heredar el título tras el fallecimiento de su abuelo, José Luis de Carranza Vilallonga, anterior titular del marquesado.
Según el anuncio, otros posibles herederos tienen un plazo de treinta días desde la publicación del edicto para reclamar el título. El caso ha llamado la atención, especialmente en redes sociales, donde la periodista Eva Belmonte ha publicado la noticia en su cuenta de X (anteriormente Twitter).
El Marquesado de la Villa de Pesadilla fue creado por el rey Carlos II en 1699 y ha perdurado durante siglos como un título vinculado a la historia de una villa despoblada que ahora forma parte del municipio de San Sebastián de los Reyes.
Historia de la Villa de Pesadilla
La Villa de Pesadilla tiene una historia que se remonta a tiempos prerromanos, según lo documentado por la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales. Ubicada en lo que hoy es nuestro término municipal, este asentamiento tuvo un papel importante en la región, siendo mencionado ya en textos del siglo XII.
El lugar fue habitado desde el siglo II a.C., como lo confirman los hallazgos arqueológicos realizados en la zona del Coto de Pesadilla, donde se descubrieron restos de un pequeño establecimiento humano y de una ermita medieval. En las Relaciones Topográficas de Felipe II, se menciona que la villa pertenecía al Reino de Toledo, bajo jurisdicción de Valladolid y propiedad del Arzobispado de Toledo.
A lo largo de su historia, la Villa de Pesadilla fue una parada importante para los viajeros en el camino entre Madrid y Francia. Contaba con una parada de postas para los carruajes que se dirigían al norte desde la capital. Con el tiempo, la villa fue despoblándose hasta su desaparición definitiva en el siglo XIX. En 1822, el término municipal de Pesadilla se integró oficialmente en el de San Sebastián de los Reyes. Hoy en día, uno de los últimos vestigios de la Villa de Pesadilla es una encina de más de 500 años con un tronco de cinco metros de diámetro, que sigue en pie como testigo de la larga historia de este lugar.
En 1997 se realizaron excavaciones en el despoblado medieval de la Villa de Pesadilla, que sacaron a la luz más restos arqueológicos y permitieron un mayor conocimiento de su importancia histórica. La villa llegó a tener hasta 60 vecinos, lo que indicaba una población de unos 300 habitantes.
