Autor: Juan Angulo
Buena parte de las competencias que forman parte esencial de las necesidades de nuestro municipio están en manos del Gobierno Autonómico. Aspectos clave como la educación, la sanidad, los derechos sociales, los transportes o la vivienda, tienen buena parte de su asignación presupuestaria puesta sobre la responsabilidad de la Comunidad de Madrid y de su Gobierno.
Los próximos 21 y 22 de diciembre se debatirá en la Asamblea de Madrid el proyecto de Presupuestos Autonómicos 2022 que presenta el Gobierno de Ayuso, y que Vox ha manifestado que apoyará, a cambio, entre otras cosas, de rechazar cualquier proposición de mejora que venga de los partidos de izquierda.
Este gesto de sectarismo político no es un gesto contra la izquierda únicamente. Significa, además, no atender a las necesidades transversales que tiene la ciudadanía de la Comunidad de Madrid en general, ni a las de San Sebastián de los Reyes en particular. Mejorar el transporte, la sanidad pública, construir un instituto o crear empleo de calidad, verde, estable y bien remunerado, no son propuestas exclusivamente de izquierda. Deben ser entendidas como un camino conjunto que debemos recorrer toda la ciudadanía madrileña y sansera unida, porque los tiempos nos exigen medidas acordes y presupuestos que posibiliten esas medidas concretas para mejorar la vida de la gente, para avanzar hacia una sociedad más moderna, sostenible y solidaria.
El Grupo Parlamentario Unidas Podemos ha presentado en la Asamblea de Madrid 1.655 enmiendas a los presupuestos de Ayuso y Vox, que superan en conjunto los 23.000 millones de euros. Sin embargo, si la Comunidad de Madrid no tuviera articulada una legislación que nos convierte, de facto, en un paraíso fiscal para millonarios, podríamos estar hablando de 30.000 millones de euros. Pero aún con la insolidaria e ineficaz propuesta presupuestaria que han ofrecido Ayuso y Vox a nuestra ciudadanía, en Unidas Podemos hemos demostrado con estas enmiendas -rechazadas por ambos partidos sin ser leídas- que tenemos un modelo de Comunidad y de municipios que optimiza mucho mejor el dinero público, y, sobre todo, que mira al futuro.
En materia de vivienda proponemos consolidar un verdadero parque de vivienda social asequible, casi inexistente hasta ahora en la Comunidad de Madrid, aprovechando el derecho de tanteo y retracto para adquirir viviendas vacías en condiciones muy ventajosas para las arcas públicas. Les proponemos la creación de una Agencia Protección al Consumidor para evitar abusos bancarios e inmobiliarias, o la creación de un Observatorio de Vivienda Regional, ya que no se tienen apenas datos actualizados en materia de vivienda.
El sistema de salud pública madrileña lleva décadas siendo desmantelado. Además de proponer la construcción de nuestro Centro de Salud en Dehesa Vieja, la apertura de la Torre 4 del Hospital y del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) de la Avenida España, necesitamos devolver a la Sanidad Publica las cantidades presupuestarias necesarias para hacer frente a los sucesivos años de recortes. Los 5 sindicatos de la mesa sectorial denuncian que este presupuesto sanitario es 781 millones menor que lo ejecutado en 2019, ¡y eso estando aún en plena pandemia! El gasto en Atención Primaria es menos del 11% del gasto total en Sanidad. La media estatal es 14% y la OMS recomienda, al menos, 25% del presupuesto de Sanidad. Necesitamos una apuesta firme en Atención Primaria, pero para Ayuso esto no debe ser importante, porque también rechaza nuestra propuesta para llevarlo a cabo.
La Educación Pública, otro pilar de nuestra sociedad, por tocar otro de los ejemplos de políticas transversales a izquierda y derecha, tampoco parece tener la importancia suficiente como para que Ayuso y Vox escuchen propuestas de la oposición. La arrogancia de ambos dejan a Sanse un año más sin Instituto de Enseñanza Secundaria en Tempranales, pero también descartan de un plumazo aumentar el número de profesores en 5.000 personas, las 53 iniciativas de construcción de Centros Públicos que hemos presentado, o la revisión y estudio del programa bilingüe -que esta siendo muy cuestionado-. Rechazan investigar sobre el masivo e ilegal cobro de cuotas en centros concertados, el incremento de las becas pre-doctorales o impulsar un plan de retorno a investigadores emigrados por sus malas condiciones laborales.
En Transportes, les hemos propuesto mejorar la plantilla de Metro en más de 1.000 conductores, para aumentar la frecuencia y la calidad del servicio. En Medio Ambiente, comenzar a trabajar en una política autonómica de Residuo Cero. En Igualdad, donde se dedica la mitad de dinero que en 2013, siendo las necesidades poblacionales muy superiores, les hemos propuesto la apertura de Centros De Crisis 24 horas. Actualmente sólo contamos con uno: el Hospital La Paz. El Convenio de Estambul indica que deberíamos tener un Centro por cada 200.000 habitantes. Esto significa que, por población, en Alcobendas y Sanse deberíamos tener uno. Estos Centros resultan claves para garantizar la trazabilidad de las pruebas médicas para probar una agresión sexual o una violación, la correcta atención a las víctimas, o la coordinación entre equipos médicos y Policía.
Todas estas propuestas y cientos de propuestas más, hechas en positivo y escuchando las necesidades de los territorios, resultan perfectamente realizables con el presupuesto actual, sin aumentar ni un sólo euro del ineficaz y derechizado sistema recaudatorio madrileño. Mil seiscientas cincuenta y cinco propuestas rechazadas porque vienen de la izquierda. Por puro odio. Desafortunadamente estas necesidades, fruto de la escucha y del sentido común, no son solamente importantes para quienes somos de izquierda, sino para el conjunto de nuestra sociedad que, al igual que las enmiendas presentadas, se ve lamentablemente rechazada por los Presupuestos de Ayuso y Vox.
Cuando lleguen las elecciones volverán las promesas, pero la realidad es tozuda y los números no mienten.
¡Menos palabras y más partidas presupuestarias!
