El Ayuntamiento de Sanse ha publicado una nota de prensa en la que un dato de interés general. Se ha gastado 476.000 euros en contratos de emergencia para luchar contra el coronavirus. Durante semanas, «los servicios económicos del Consistorio han tenido que afrontar y redimensionar sus esfuerzos para responder a las peticiones diarias surgidas desde las distintas delegaciones de la organización municipal», explican.
Así, destacan el reparto de las famosas 250.000 mascarillas higiénicas reutilizables a los vecinos. Lo que no se escribe en dicha nota de prensa es el coste de haber comprado estas mascarillas y del reparto que ha hecho una empresa externa a San Sebastián de los Reyes. A su vez, el Ayuntamiento incide en la mejora en la desinfección de calles, espacios públicos o comercios con distintos métodos complementarios y de la máxima eficacia. Entre ellos destaca el ozono.
Recordemos que el Gobierno Municipal compraba a comienzos de la pandemia cinco cañones de ozono para servicios de emergencia. Según ha podido saber Diario de Sanse su coste es de 4.880 euros y un IVA repercutido de 1024,80 euros.
Otro de los esfuerzos económicos más importantes ha consistido en cuidar e informar a los vecinos más desfavorecidos y a los colectivos más vulnerables, con la puesta en marcha y refuerzo del servicio de atención telefónica del área relacionada con la atención social
También, se ha destinado dinero (no detallan cuanto) en equipos informáticos y de comunicación para garantizar el cumplimiento de los servicios esenciales municipales. Gracias a esta medida, se ha hecho posible el teletrabajo de 200 empleados públicos, facilitando así que los ciudadanos pudieran seguir realizando sus trámites con la administración municipal.
Además, otros contratos de emergencia son los suministros de comidas al cuerpo de voluntarios de Protección Civil, o la instalación de más de 100 mamparas de protección en los centros de atención municipal.
Todo ello, sin que la ayuda de 6,8 millones de euros a los vecinos afectados por esta crisis haya sido aprobada todavía, tal y como reclama la oposición en bloque.