El Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes comienza la Fase 2 de la ‘desescalada’ con la reapertura de numerosos servicios municipales que contribuirán a facilitar la vida de los vecinos y reforzarán el camino hacia una normalidad en la que el Ejecutivo municipal lleva trabajando desde hace muchas semanas.
Entre ellos, destacan la apertura al 30% de capacidad y mediante cita previa de los centros deportivos Viña Fitness y el Polideportivo Municipal Dehesa Boyal. Eso quiere decir que este mes el consistorio ya cobrará el recibo de estos servicios del «Superabono», pero solo un 50% de la cuota, tal y como han anunciado en sus redes sociales el Alcalde y el Vicealcalde de la localidad.
Además, el Ayuntamiento recupera la recaudación de la «zona azul». Quedará reactivada el 8 de junio, aunque no se realizarán sanciones los días 8, 9 y 10 y se informará a los usuarios que el 11 de junio el funcionamiento de estas áreas será el habitual. En este sentido, se anima a los usuarios de dicha zona a utilizar las plataformas de pago móviles para evitar el uso del dinero en metálico.
También estará ya disponible de manera presencial, el Servicio de Atención al Ciudadano. Reabre la posibilidad de realizar in situ todos aquellos trámites que técnicamente puedan ser considerados de urgencia y que no afecten a sujetos obligados, restringiéndose únicamente para personas físicas. Asimismo, se permitirá gestionar presencialmente las identificaciones para la emisión de certificados digitales, así como los trámites relacionados con la obtención del padrón municipal.
A su vez, se reabren las áreas caninas, lo que supondrá un alivio al ampliar las posibilidades para el paseo y recreo de las distintas mascotas. A estas medidas, se añade la reapertura del cementerio (aunque ya estaba abierto la semana pasada), restringida a un aforo limitado.
Y en cuarto lugar, vuelve a la actividad el mercadillo municipal de los miércoles, sujeto también a restricciones destinadas a garantizar la prevención y la seguridad sanitaria. Estas son de máximo de 33% de capacidad y con distancia social.
Todo ello con las medidas higiénicas determinadas por la crisis del coronavirus. Es decir, mascarilla obligatoria, limpieza de manos y distancia social.